La innovación es una necesidad en un mercado exigente y competitivo como el de la construcción residencial. En Abaigar sabemos que hemos de ofrecer viviendas más espaciosas, confortables y eficientes en el consumo de energía. Los materiales e instalaciones deben ser respetuosos con el medio ambiente y tener una larga vida útil para disminuir su mantenimiento.
Estas condiciones requieren que los procesos de diseño y edificación sean también más rigurosos. Por una parte, como ya hemos apuntado en un artículo anterior, los modelos tradicionales están siendo sustituidos por la construcción industrializada, que permite planificar y fabricar muchos de los elementos que después se colocarán en el inmueble. Esto incentiva la adopción de nuevos materiales y evita errores a pie de obra.
Por otra parte, se ha transformado el modo en que se conciben y planifican los edificios gracias a la implantación de la metodología BIM (Building Information Modeling), un procedimiento que hemos integrado en nuestra empresa en los últimos años.
Qué es el BIM
El BIM es una herramienta digital que facilita en gran medida el diseño de los proyectos. Se basa en la creación de modelos tridimensionales que contienen información muy detallada de todos los aspectos de un edificio, desde su fisonomía exterior y distribución interior hasta los materiales, instalaciones, costes y fases de construcción. Con el BIM se desarrolla un trabajo global en el que están involucrados todos los participantes en el proyecto: promotores, arquitectos, ingenieros, constructores y proveedores.
Se trata de simular por ordenador todos los detalles de un inmueble antes de realizar cualquier tarea. Respecto de los sistemas de diseño y construcción tradicionales, basados en la gestión de documentos independientes y flujos de trabajo manuales, el BIM comporta un modelo de trabajo colaborativo en el que las personas comparten la misma información, que se actualiza en tiempo real. Con ello se obtienen importantes ventajas que resumimos en unas líneas:
- Se poseen mediciones precisas y fiables en todo momento, algo que evita los errores en la obra.
- Es posible calcular al detalle los recursos necesarios, los costes y los plazos de ejecución. No hay sorpresas al construir.
- La herramienta ayuda a optimizar el diseño del edificio en cuanto su funcionalidad, eficiencia energética o aprovechamiento de los espacios.
- Es más fácil realizar cambios en el proyecto, porque son inmediatamente asumidos por todas las partes involucradas
- Contribuye a mejorar la calidad final de la construcción: nada se improvisa.
Beneficios del BIM para los residentes de una vivienda
La adopción del BIM facilita mucho la tarea de los profesionales, pero también, y quizá es lo que más interesa a nuestros clientes, proporciona claras ventajas a los futuros propietarios de una vivienda. Por una parte, como hemos señalado, se benefician de un diseño más funcional y eficiente. La vivienda resulta más confortable en el día a día, consume menos energía y es más respetuosa con el entorno.
Por otro lado, la precisión ayuda a que la estructura y características del inmueble sean más sólidas y duraderas. Es mucho más difícil que surjan errores en la construcción o vicios ocultos. Asimismo, se conocen mejor las necesidades y costes de mantenimiento en el largo plazo. Y, en el futuro, en el caso de que se desee hacer cambios en la casa, la información disponible facilita las reformas. Con el BIM sabemos dónde se encuentra exactamente cualquier elemento estructural o instalación.
En Abaigar hemos apostado claramente por el BIM. Hemos reforzado nuestro equipo con especialistas en esta metodología, cuyo uso se ha extendido a todos los departamentos implicados en el desarrollo de una promoción.
Como referencia, se ha aplicado esta metodología en conjuntos residenciales como Nova Txantrea, Izarra Plaza, ahora en construcción, y para próximas promociones como Más Txantrea o las viviendas libres que saldrán a la venta en Etxebakar, en Berrioplano.
Para Maite Aguirre, arquitecta y Gestora BIM de Abaigar, esta herramienta ayuda a unificar el modelo del edificio con la gestión de toda la información asociada y que esté disponible en todo momento para cualquiera de los profesionales que colaboran en el desarrollo de la promoción».
Y, de hecho, también es un activo fundamental en la paso hacia la industrialización de la construcción. «En la construcción industrializada hay poco margen para la improvisación. Todos los aspectos deben ser definidos y resueltos en el proceso de fabricación. Para alcanzar ese objetivo, el uso del BIM no es una opción, sino una necesidad».
En definitiva, la metodología aporta mejoras en la calidad y eficiencia a las viviendas. Lo podrás comprobar en tu próxima casa Abaigar.
